En nuestro día a día, en muchas ocasiones tenemos la presión de hacer una gran cantidad de actividades en el hogar, en el trabajo, entre otros; por lo que eso puede llevarnos a tener una vida muy agitada. Día a día van incrementado los niveles de estrés, por ello es importante identificar en qué momento cruzamos los límites de estrés o miedos normalmente manejable y pasamos a otra dimensión, en la que se convierte en un trastorno que afecta la salud y nuestra vida en general.
El miedo es una emoción propia de nuestra especie, nos permite prevenir, protegernos de los peligros y asumir amenazantes. No obstante, cuando se sufre más por lo que imaginamos que por lo que ocurre, podemos estar en presencia de un problema, la ansiedad; hace que constantemente se sienta la sensación de peligro sin que sea cierta en la magnitud que se percibe, incluso sin que exista.
La ansiedad puede definirse como una respuesta emocional que se produce en una persona ante una situación en la que percibe peligro, magnifica la amenaza que representa y en consecuencia hace que ese temor sea excesivo y frecuente. Es otras palabras, se vuelva recurrente, a ese nivel es considerada un trastorno que involucra una serie de desequilibrios a nivel psicofisiológico e incluso conductual. Por lo tanto, puede estancarnos en las actividades normales y sobre todo afectar nuestra salud en diversos aspectos.
Entre las manifestaciones de la ansiedad, destaca el hecho de reacciones extremas y constantes ante eventos comunes en el entorno, las cuales escapan de la voluntad de afectado. Esas reacciones suelen ser intensas, recurrentes, producen desasosiego, malestar en el individuo, lo que a la larga perjudica su estabilidad en diversos aspectos de la vida, a nivel individual, familiar, afectivo, laboral, entre otros.
Los elementos que pueden advertir un padecimiento de ansiedad son variados:
- Resaltan los subjetivos o de pensamiento entre los que se reconocen los pensamientos negativos en general como:
- El temor
- La preocupación
- La anticipación a la amenaza
- Dificultad de concentración
- Pérdida de control del entorno
- Por otra parte, los observables tales como:
- Palpitaciones
- Tensión arterial alta
- Aumento de pulsaciones
- Opresión torácica
- Respiración agitada
- Disturbios estomacales
- Dolor de cabeza
- Fatiga
- Tensión muscular
- Hormigueo
- Sudoración
- Mareos
Es importante recalcar que la ansiedad puede ser superada, para ello debe ser atendida oportunamente por los problemas que genera en la salud, en nuestra interacción con los demás y en general nuestra calidad de vida. Al sospechar su padecimiento es necesario buscar la ayuda profesional de psicólogos y/o psiquiatras, de modo de abordar este trastorno con el conocimiento que permita lograr asesoría de calidad que garantice alcanzar una vida estable, sana y feliz.
Aunque todas las personas que experimentan ansiedad pueden llegar a tener síntomas similares, es muy importante entender que la ansiedad es un trastorno multifactorial, es decir, tiene factores biológicos, psicológicos y ambientales. Por lo que siempre sera necesario la atención individualizada en Terapia psicológica para evaluar los síntomas, las causas y crear un plan de tratamiento mediante técnicas para aprender a manejar los pensamientos que generan ansiedad, la anticipación a los hechos y para aprender a vivir en el presente y no en un futuro catastrófico.
Cuéntame tus dudas y comentarios, espero este artículo te ayude a reflexionar e identificarte o personas cercanas que se encuentren en esta situación.
Algunas técnicas para poder manejarla