Es común y normal recordar con nostalgia hechos y personas de nuestra infancia, por ejemplo se habla de los sabores de la niñez al referirse a las comidas y alimentos que consumimos en nuestra temprana edad, igualmente surgen recuerdos de quienes compartieron con nosotros esa etapa y tuvieron un papel significativo para nosotros. En tal sentido, Ernesto Sábato afirmó que a lo largo de nuestra vida, sobre todo al haber pasado más tiempo, emergen los recuerdos y añoranza del encanto de nuestra niñez.
El fenómeno que se caracteriza por una vinculación afectiva, perdurable, profunda y particularísima entre dos seres humanos que brinda seguridad, protección mediante la cercanía en momentos de peligro, obtuvo una interpretación con el desarrollo de lo que se conoce como la Teoría del Apego, cuyo pionero fue John Bowlby, en la segunda mitad del siglo XX.
A partir de la caracterización del apego, se ha desarrollado la teoría que procura dar explicación a la naturaleza de las reciprocidades entre las personas, y fortalecen ese nexo afectivo que se solidifica y consolida para brindar resguardo, certeza, confianza. En consecuencia, es conveniente conocer planteamientos de autores que identifican perspectivas complementarias, sobre todo desde la visión de las personas en su vida diaria.
«Cuando hablamos o escuchamos acerca del apego por lo general le damos connotaciones negativas»
Psicóloga Andrea San Gil
El apego seguro e inseguro
Visto desde este ángulo, el abordaje del apego puede entenderse en dos facetas, una el apego seguro y la otra el apego inseguro. El primero de ellos, el apego inseguro está determinado por interacciones negativas
«El apego inseguro, el ambivalente, evitativo y desorganizado, ese que nos hace sentir que no podemos vivir sin la otra persona y que nuestra felicidad depende de otros. Esa creencia que nos impulsa a hacer todo lo posible para que esa persona no nos abandone, llegando incluso a perder nuestra propia identidad»
Psicóloga Andrea San Gil
Este apego inseguro produce un ambiente propicio para lo que se puede llamar trampas, las cuales ponemos nosotros mismos, estafas emocionales que puede devenir en lo que se conoce como esclavitud emocional.
La otra cara de esta moneda es el apego seguro, signado por vínculos afectivos positivos
«Apego seguro, ese que hace que confiemos en las personas que estamos apegados, ese que nos da la certeza de que al pedirle ayuda a alguien esa persona nos va a escuchar y si puede nos ayudará»
Psicóloga Andrea San Gil
El conocer los apegos puede llevarnos a decidir, sobre la necesidad de vencerlos para lograr vivir sin ellos, o en todo caso con apegos seguros, en procura de generar un contexto de relaciones y vínculos afectivos positivos, proclive o desarrollar y consolidar una vida sana.
En el segundo capítulo del libro «El Mapa del Amor», encontrarás mucho más acerca de estafas emocionales, identificar el apego, aprender a vivir sin apego y acerca de las relaciones sanas.
>> Conocer Más sobre «El Mapa del Amor»
¿Te has sentido identificado o alguna persona persona cercana a ti con lo que significa el apego?